Se llama matón al individuo agresivo y peleador que busca amedrentar a las otras personas . Los matones, por lo tanto, pretenden conseguir beneficios a partir de la intimidación e incluso del uso de la fuerza física .
Por ejemplo: “Cuando era chico, había un matón en mi escuela que siempre me quitaba las golosinas”, “Me gustaría que un matón me ayude a cobrar el dinero que varias personas me deben… ”, “El empresario fue denunciado por contar con matones que amenazan a sus competidores”.
Existen diferentes clases de matones. Algunos actúan por cuenta propia, recurriendo a la violencia para satisfacer sus intereses. Otros matones, en cambio, asumen ese rol para un tercero a cambio de dinero.
El niño o adolescente que acosa a un compañero puede ser considerado como un matón. El bullying se lleva a cabo de distintas maneras: el matón puede quitarle dinero al acosado a través de amenazas o golpearlo frente a la clase para humillarlo, por citar dos posibilidades.
Un hombre que agrede a su pareja también procede como un matón. Este comportamiento a nivel doméstico lleva a la mujer a someterse a la voluntad de su marido, cónyuge o novio.
Aquel que cobra para desempeñarse como matón, en tanto, ofrece la intimidación y los ataques violentos como “servicios”. La actividad, por supuesto, es ilegal y suele considerarse como un accionar típico de la mafia o de otro grupo delictivo. Un narcotraficante puede contar con matones que atacan a los deudores e incluso a los distribuidores que no cumplen con los mandatos del jefe, por mencionar un caso.
